1.- Hice todo lo que no se debe hacer en una entrevista de trabajo. La chica de la centralita me dijo que esperara. "Vale, voy a redacción a saludar". Como una estrella, "¿qué haces aquí?", me decían. Al final el jefazo me tuvo que esperar a mi. "Sabes que este es el periódico más, serio, no mentimos, y todo lo que escribirás será mucho más leído. Más responsabilidad". Así empezó. "Los jóvenes no tenéis vocación". Luego me hizo un resumen de su trayectoria. "Perdona, le corté, tengo un poco de prisa. Si me habéis llamado es para hacer una oferta ¿no?, No te estoy pidiendo trabajo, no tengo que demostrar mi vocación ni nada, me has llamado tú". "Vale. Este es el sueldo sugún el convenio", espetó. "Bueno, el dinero me da más igual, ¿qué es lo que haría aquí?", pregunte. "Eso ya se vería. De momento te vienes, ¿qué podrías hacer?", me preguntó. "Pues quedaré un poco gilipollas, pero creo que estoy preparado para todo".
2.- Nada más salir del despacho me di cuenta de que había sido un poco malducado. El sueldo no me daba igual, es una pasta. Pero le pillé varias mentiras: ese ya veremos lo que haces no es normal, ese sueldo no es normal, y sobre todo el "aquí nunca hemos despedido a nadie", cuando conozco a más de uno.
3.- Todo eso fue el jueves. Una llamada de I me avisó: "estoy de parto".
... Y hasta aquí puedo leer
miércoles, junio 6
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6 comentarios:
Hombre... un jueves cualquiera... tampoco. No se le rifan a uno todos los días, ¿no crees?
1.- ¿Mal educado?... No sabía yo que hacerse de valer, se le llamaba ahora ser mal educado, en todo caso... podrían tacharte de ¿vanidoso, presuntuoso, pedante...? pero que quieres que te diga, a mi me parece que cuando uno está en posición de ventaja, puede permitirse ciertas licencias... todos los días no puede uno permitirse el lujo de encender la hoguera de las vanidades, y a ti te han puesto las cerillas en las manos... vamos, esto solo es una opinión, y ¡que coño! que me parece genial, así es como yo lo hubiera hecho.
2.- Habrá que leer la letra pequeña con lupa.
3.- Y...? No nos dejes así, ¡leñe!
¿A qué huelen las ofertas que huelen mal?
1. Bueno, más que eso tú s que ibas como quien va de visita... y uno nunca sabe lo que va aser un plus o un resto; igula ibas de formalito, de puntual de "no, no, yo tengo vocación" y al final la impresión es peor porque te tachan de insustancial. Si te lo pedía el cuerpo bien hecho está.
2. Una pasta según convenio... eso sí que es raro, muy raro... tendré que mirar el convenio del sector o los que pueda existir de grandes publicaciones a ver que e lo que se cuece por ahí.
3. También nacida en jueves???
... tarjetita por aquí.
A.R.: ¿A entierro profesional?... no sé, es como cuando A· ficha a alguien, gran fichaje, grandes eurazos, programa al canto, retirada de antena la segunda semana y luego, si te he visto no me acuerdo, el tipo o la tipa no vuelve a hacer nada en años... bueno, no, que para algo tienen las galas y telemaratones, para amortizar esos grandes fichajes.
Pues es, a mi es que ese "Eso ya se vería. De momento te vienes, ¿qué podrías hacer?" me suena y huele a eso, yo te ficho y te guardo en un cajón
Pues a mí me parece muy bien tu comportamiento, Joao. Lo primero: son ellos los que te llaman a tí, los que están interesados en contratarte así que que se vendan bien. Y lo segundo: ¿qué sabes hacer? Si quieres ficharte será porque siguen lo que escribes, ¿no? así que ya deberían saber lo que sabes hacer.
No sé, no sé. No me ha convencido ese jefe
De todas formas... ¡ojito!, cuidado... tampoco hay que creerselo tanto.
Además, los grandes fichajes salen de grandes negociaciones. Tampoco hay que reducir la cosa a blanco o negro, todo o nada, par o impar... y andar con PRISA.
La clave está ahí, en NEGOCIAR, en LA LETRA PEQUEÑA, en los CONTRATOS BLINDADOS, en yo valgo tanto, ¿tu que tienes para mi?, mi TIEMPO es oro, ya es sabido que esto es el ABC de todo EL MUNDO, nadie está en posesión de LA VERDAD, ni una pasta por convenio sería LA RAZÓN para un suicidio inducido, aunque hay que reconocer que la envidia es el deporte nacional de EL PAIS en el que vivimos. Vamos, como Zapatero y Rajoy, mucho ir y venir, ahora en tu casa , después en la mía, y si al final no sale nada... pues cada uno por donde ha venido y aquí no pasa nada.
No hay que precipitarse, hay que ser más sibilino... A veces, "parecer" tonto, relaja al contrario, haciendo que se crezca y que finalmente... termine por enseñar sus cartas, el plumero, en este caso la Pluma, pues de eso estamos hablando, del color y de la verdadera intención de la pluma literaria que trata de hacer un nuevo fichaje.
¡Paciencia!... es la madre de todas las ciencias.
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